Consejos prácticos

Padilla Oftalmología

Cómo prevenir la fatiga visual por el uso de pantallas

  • Practica la regla 20-20-20: cada 20 minutos, aparta la vista de la pantalla y enfoca tu mirada en un objeto que esté al menos a 20 pies (unos 6 metros) de distancia durante mínimo 20 segundos.
  • Ajusta el brillo y el contraste de tu pantalla para reducir el esfuerzo visual y ajusta la configuración de tamaño de fuente para que sea cómoda de leer.
  • Utiliza filtros antirreflejos en tus pantallas para reducir el deslumbramiento y la fatiga ocular, especialmente si trabajas en entornos con iluminación artificial intensa o si pasas largos períodos frente a la pantalla.
  • Parpadea más a menudo para mantener tus ojos lubricados y utiliza gotas de lágrima artificial si experimentas sequedad ocular o molestias.
  • Asegúrate de que tu área de trabajo esté bien iluminada para reducir la tensión ocular y evita trabajar en la oscuridad, ya que esto puede aumentar la fatiga visual.

Consejos para mantener una buena salud ocular en el trabajo

  • Ergonomía visual ajusta la configuración de tu estación de trabajo para minimizar el deslumbramiento y reducir la tensión ocular, colocando la pantalla a una distancia y altura adecuadas.
  • Mantén una distancia de trabajo adecuada, en torno a unos 40cm de los ojos, para realizar actividades que requieren esfuerzo visual mantenido de cerca, como leer o mirar el móvil. En el caso de ordenadores, se recomienda tener la pantalla a una distancia entre 50 y 60 cm de los ojos.
  • Considera el uso de filtros antirreflejos en tus pantallas para reducir el deslumbramiento y mejorar la claridad visual.
  •  Realiza pausas visuales regulares para descansar tus ojos e intenta parpadear más a menudo.
  • Mantén tu área de trabajo bien iluminada y evita trabajar en la oscuridad para reducir la tensión ocular y mejorar la concentración.
  • Programa exámenes oculares regulares con tu oftalmólogo para detectar cualquier problema ocular a tiempo.

Importancia de los exámenes oculares regulares

  • Programa exámenes oculares anuales con tu oftalmólogo para detectar problemas oculares temprano y recibir tratamiento adecuado para mantener una buena salud ocular.
  • Comunica cualquier cambio en tu visión, como visión borrosa, destellos de luz o manchas flotantes, a tu oftalmólogo durante tus exámenes oculares para una evaluación completa.
  • Mantén un registro de tu historial ocular, incluyendo cualquier cirugía ocular previa o condiciones médicas relacionadas con los ojos, para que tu oftalmólogo pueda proporcionar un cuidado personalizado.
  • Sigue las recomendaciones de tu oftalmólogo para el cuidado continuo de tus ojos, incluyendo el uso de gafas o lentes de contacto según sea necesario y el seguimiento de cualquier tratamiento recomendado.
  • Prioriza tu salud ocular participando activamente en la prevención y detección temprana de problemas oculares a través de exámenes oculares regulares y la comunicación abierta con tu equipo de oftalmología/optometría.

Importancia del descanso adecuado para la salud visual

  • Prioriza el sueño suficiente cada noche para permitir que tus ojos y todo tu cuerpo se recupere adecuadamente.
  • Prácticas de higiene del sueño: establece una rutina de sueño regular y sigue prácticas de higiene del sueño saludables, como apagar los dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarte.
  • Practica técnicas de relajación, como la meditación o la respiración profunda, para reducir el estrés, ya que puede afectar negativamente a la conciliación del sueño
  • Sigue una rutina de higiene ocular antes de acostarte, según indicaciones de tu oftalmólogo.
  • Asegúrate de que tu entorno de sueño esté oscuro y tranquilo para facilitar un descanso reparador.

Signos de problemas oculares comunes en adultos mayores

  • Presta atención a cambios en la visión, como visión borrosa, pérdida de nitidez o dificultad para ver de cerca o de lejos.
  • Informa a tu oftalmólogo sobre cualquier cambio en la visión, como destellos de luz, manchas flotantes o pérdida repentina de visión, para poder realizar una evaluación más  adecuada.
  • Mantén un registro de tu historial ocular, incluyendo cualquier cirugía ocular previa o condiciones médicas relacionadas con los ojos, para que tu oftalmólogo pueda proporcionar un cuidado personalizado y un seguimiento regular.
  • Sigue las recomendaciones de tu oftalmólogo para el manejo de enfermedades oculares crónicas, como el glaucoma, la degeneración macular o la retinopatía diabética, para minimizar el riesgo de complicaciones y preservar la salud visual.